Abstract

La evaluación docente genera nuevos roles, competencias y desempeños en los docentes, promueve nuevas demandas y desafíos, visibilizando la necesidad de estructurar un pensamiento reflexivo sobre las prácticas y creando responsabilidad en el aprendizajes en los estudiantes. Por ello, los maestros se hacen cada vez más participes de la necesidad de evaluar la totalidad de los procesos en la escuela, y por tanto se hacen consientes de la evaluación de sus competencias, sus desempeños, los procedimientos y alcances para el mejoramiento de la calidad de la educación y de la propia docencia. El presente texto actualiza conocer lo que sucede, hacer metaevaluación de la docencia; así como los aportes reales que en el ámbito personal e institucional generan las evaluaciones, considerando las responsabilidades y consecuencias del proceso en el ejercicio profesional y resaltando los principales logros y tensiones que se presentan.